TIEMPO DE VERANO
junto al mar, entre sábanas tendidas,
la luna traspasando barandas en el patio,
y sombras de alambradas en la piel
para escribir la música de un sueño".
La sombra de otro mar, Joan Margarit
Despedimos
este curso al tiempo que damos la bienvenida al verano. Y lo hacemos guiados
por los versos de algunos conocidos poetas: Manuel Machado nos
ofrece una paleta de colores veraniegos, Andrés Sánchez Robayna nos deja su deseo de verano y Francisco Brines nos invita a regresar al verano más
dichoso de su juventud.
Os
deseamos que disfrutéis de este tiempo de vacaciones y descanso, y que la luz veraniega
ilumine vuestros días para que compongáis un “sitio de dicha” al que siempre
podáis regresar.
Verano
Frutales
cargados.
Dorados
trigales...
Cristales
ahumados.
Quemados
jarales...
Umbría
sequía,
solano...
Paleta
completa:
verano.
cargados.
Dorados
trigales...
Cristales
ahumados.
Quemados
jarales...
Umbría
sequía,
solano...
Paleta
completa:
verano.
Manuel Machado
El
verano alumbró las laderas de nuevo,
con
otro sol más puro cegó las hondonadas,
incendió
la morera. Sobre el torso del día
dejó
sus secos signos, el fuego material.
Ave,
sobre la tierra desnuda del verano,
muestra
tu sombra breve. En el aire callado,
o en
el solo susurro de incesantes abejas,
enséñanos
tu vuelo contra la eteridad.
Andrés
Sánchez Robayna
Aquel
verano de mi juventud
¿Y qué es lo que quedó de aquel viejo verano
en las costas de Grecia?
¿Qué resta en mí del único verano de mi vida?
Si pudiera elegir de todo lo vivido
algún lugar, y el tiempo que lo ata,
su milagrosa compañía me arrastra allí,
en donde ser feliz era la natural razón de estar con vida.
en las costas de Grecia?
¿Qué resta en mí del único verano de mi vida?
Si pudiera elegir de todo lo vivido
algún lugar, y el tiempo que lo ata,
su milagrosa compañía me arrastra allí,
en donde ser feliz era la natural razón de estar con vida.
Perdura
la experiencia, como un cuarto cerrado de la infancia;
no queda ya el recuerdo de días sucesivos
en esta sucesión mediocre de los años.
Hoy vivo esta carencia,
y apuro del engaño algún rescate
que me permita aún mirar el mundo
con amor necesario;
y así saberme digno del sueño de la vida.
no queda ya el recuerdo de días sucesivos
en esta sucesión mediocre de los años.
Hoy vivo esta carencia,
y apuro del engaño algún rescate
que me permita aún mirar el mundo
con amor necesario;
y así saberme digno del sueño de la vida.
De cuanto fue ventura, de aquel sitio de dicha,
saqueo avaramente
siempre una misma imagen:
sus cabellos movidos por el aire,
y la mirada fija dentro del mar.
Tan sólo ese momento indiferente.
Sellada en él, la vida.»
saqueo avaramente
siempre una misma imagen:
sus cabellos movidos por el aire,
y la mirada fija dentro del mar.
Tan sólo ese momento indiferente.
Sellada en él, la vida.»
Francisco
Brines
LA
BIBLIOTECA OS DESEA FELIZ VERANO